MAX

Diseñado en 1983, el sofá Max conserva su atractivo icónico completamente intacto. Es un sofá-objeto que, con sus formas esculturales y líneas sinuosas, juega un papel principal en cualquier espacio, ya sea en el hogar ya sea en los espacios públicos como una sala de espera, un despacho directivo, una zona lounge o una boutique. Su ligera estructura metálica tubular, disponible en diferente acabados, sostiene el cojín del asiento, con una característica forma de alubia, y el cojín cilíndrico del respaldo. El sofá Max se puede tapizar tanto de piel como de tela. También se fabricó una versión de culto, con una original tapicería de efecto óptico de piel en blanco y negro, que quedó fijado en el imaginario colectivo gracias a una memorable fotografía de Gabriele Basilico.